Síntomas del Primer Trimestre y Fase Embrionaria
> Semanas 1 y 2 del Ciclo Menstrual: Desde la Menstruación hasta la Ovulación
> Tercera semana del Ciclo: De la Ovulación a la Concepción
> Cuarta Semana: Implantación y Fase Luteal
> Primera Semana de Embarazo: Primeros Síntomas de Embarazo y Desarrollo Fetal
> Segunda Semana de Embarazo: Que esperar durante el Primer Trimestre
> Inicio del Calendario del Embarazo
En la Parte 4 analizamos el desarrollo embrionario temprano en las semanas posteriores a la implantación así como los principales síntomas tempranos de embarazo. Como se dijo enteriormente, los primeros signos de embarazo más allá de la confirmación mediante una prueba de embarazo, incluyen el sangrado por implantación, la falta de menstruación, náuseas matutinas, fatiga, hipersensibilidad de las mamas y los pezones, aumento de la frecuencia urinaria, aumento del apetito y antojos.
En el primer trimestre de embarazo, ahora ya han pasado de 3 a 4 semanas desde que ovulaste y concebiste; el embrión se está desarrollando rápidamente y ya los primordios de los órganos, tejidos, espina dorsal y sistema nervioso se han encaminado. Esta etapa del embarazo se conoce como la fase embrionario y dura hasta la octava semana.
Durante esta importante fase la mayoría de los órganos vitales han «brotado» y el embrión tiene unas pequeñas extremidades incipientes. El tubo neural (que a la postre dará origen a la espina dorsal y el sistema nervioso) también está en desarrollo así como las estructuras básicas que permite la circulación de la sangre; de hecho el sistema circulatorio comienza a formarse simultáneamente y en armonía con el tubo neural subyacente. Durante la cuarta semana de gestación el corazón del feto comienza a latir moviendo la sangre desde el saco vitelino hacia la placenta. Hacia la parte central del tubo neural ya se pueden ver los primeros esbozos de la médula espinal y el cerebro.
Para este momento ya el desarrollo de los órganos de los sentidos y sus tejidos relacionados se encuentra en marcha. Conforme se desarrolla el cerebro se forman «plácodas sensoriales» en sus adyacencias incluyendo estructuras lenticulares que eventualmente darán origen a los ojos; así mismo se identifican primordios nasales y aurales que luego darán origen a la nariz y oídos. Cerca de la cuarta semana también se identifica la aparición de los «arcos branquiales», muy similares a los de los peces pero con una función muy diferente ya que eventualmente cada uno dará origen a estructuras específicas incluyendo la mandíbula, boca, dientes, lengua, cuello, laringe, garganta y varias estructuras glandulares relacionadas.
Signos y Síntomas del Primer Trimestre del Embarazo
Con toda esta actividad en curso, ¡deberías sentir algo! Junto a los signos precoces que ya se han mencionado, tendrás una gran cantidad de hCG fluyendo en tu organismo lo cual hace que tu prueba de embarazo sea positivo, de hecho, en este momento ya deberías ver una línea bastante gruesa y bien definida en tu prueba. La cantidad de hCG en tu organismo puede ser un indicador de la salud de tu embarazo en las primeras etapas así como del desarrollo fetal. Por su parte, niveles bajos de hCG pueden ser un indicio de complicaciones del embarazo tales como el embarazo ectópico. En este sentido, las pruebas de embarazo en orina no son capaces de dar un nivel cuantitativo de hCG ya que sólo tu médico está en capacidad de solicitar e interpretar un análisis de hCG en sangre.
Durante la fase embrionaria es natural que tengas más apetito de lo común, sin embargo, también es posible que experimentes algunas reacciones negativas hacia ciertas comidas, algo que no tiene que ver nada en absoluto con las náuseas matutinas. Es posible que sientas una marcada aversión a ciertas comidas y olores, como por ejemplo que tan sólo la idea de comer algo te incomoda, simplemente evita ese alimento; con seguridad algún otro antojo lo compensará.
Hablando de náuseas matutinas, estas pueden hacerse más intensas conforme continúan elevándose los niveles de hCG y progesterona en tu organismo.
Normalmente las náuseas matutinas disminuirán conforme te acercas al final del primer trimestre. A pesar de cualquier sensación de malestar general o molestias digestivas, una característica típica de la gestación es el aumento de peso. Durante el primer trimestre debes esperar un incremento de peso de entre 3 y 5 Kg; tu médico está en capacidad de ayudarte con tus inquietudes sobre nutrición así como con puntos claves del embarazo que indican que todo va bien.
Finalmente, durante el primer trimestre de embarazo es posible que ocurra un aborto espontáneo (finalización espontánea del embarazo durante las primeras 20 semanas). Aunque muchas mujeres no lo saben, los abortos espontáneos son relativamente comunes y hasta el 20% de los embarazos pueden terminar en un aborto espontáneo; incluso algunos de ellos antes de que lleguen a experimentarse los primeros síntomas de embarazo. Esto puede dar lugar a un fenómeno conocido como «embarazo químico» en el cual se produce suficiente hCG para generar un resultado positivo en la prueba de embarazo pero al realizar una segunda prueba esta resulta negativa (la producción de hCG se detiene súbitamente luego de un aborto espontáneo muy precoz).
Generalmente los abortos ocurren a consecuencia de anormalidades severas del embrión o complicaciones tempranas del embarazo. Se estima que cerca de la mitad de los abortos espontáneos ocurren debido a anomalías cromosómicas. Los signos y síntomas de aborto espontáneo incluyen calambres y dolor abdominal, molestia en la zona lumbar y sangrado vaginal; sin embargo el sangrado vaginal por si solo no implica necesariamente que está ocurriendo un aborto; de hecho de todos los casos de sangrado durante el embarazo sólo el 50% terminará en un aborto. En caso que presentes sangrado consulta de inmediato con tu médico. Aún cuando un aborto espontáneo puede ser traumático y muy triste, se trata de una experiencia muy común así que no estás sóla. Tu médico puede ayudarte a resolver todas tus dudas relacionadas con esta situación.
Durante esta fase crítica del desarrollo embrionario, una dieta saludable y un buen estado de salud son la clave para que el embarazo evolucione satisfactoriamente. Come sano y equilibrado, preferiblemente alimentos de origen natural y orgánicos, además evita algunos alimentos como el marisco, ya que pueden contener niveles elevados de mercurio; además es conveniente evitar la carne y el pescado crudos o poco cocidos, si, en efecto, alimentos como el jamón curado, el sushi y el sashimi deben evitar consumirse.
Las carnes orgánicas son ideales ya que no contienen hormonas o aditivos químicos. Una vez más, los vegetales verdes ricos en ácido fólico así como las vitaminas prenatales que contienen ácido fólico son esenciales durante el desarrollo temprano del embarazo, sobre todo durante la etapa de de desarrollo del tubo neural. Las vitaminas prenatales de buena calidad tienen una cantidad adecuada de ácido fólico sin duda alguna marcarán la diferencia.